miércoles, 15 de abril de 2015

LAS PLANTAS MEDICINALES NO CURAN

Esta entrada se la voy a dedicar a mis queridos consultantes ya que algunos me han preguntado y otros, seguro, se preguntan - ¿para qué tanta hierba, y ésto me cura?-, -¿ y por qué la tengo que tomar en este momento y no en otro?-, -¿ y la podría tomar siempre, en lugar de otra bebida?-.

Partiendo de la premisa “ las plantas medicinales no curan, te curas tú”, pretendo aclarar que éstas son sólo herramientas, compuestos sinérgicos que colaboran en el proceso de recuperación o mantenimiento de la salud, es decir, es la persona la que tiene que querer cambiar para alcanzar un estado óptimo de salud.


Las plantas, son seres vivos y no un producto químico, producen energía. Están compuestas de una serie de principios activos que les confiere una o varias funciones en nuestro organismo, y por ello, debe escogerse y utilizarse según las características de la persona y el problema de salud que tenga en un momento determinado.

Dentro de esos principios activos está los alcaloides , sustancias nitrogenadas que actúan sobre el sistema nervioso, como la belladona o el boldo; los taninos, de sabor amargo y con acción astringente, antioxidante, antihemorrágicas, antiinflamatorio, cicatrizante y desinfectante, aunque es importante el control de su consumo pues puede impedir la absorción de algún nutriente, como el hierro; flavonoides, pigmentos vegetales de color amarillo, son antioxidantes, ayudan a regular el colesterol, estimulan la circulación sanguínea y refuerzan los capilares; aceites volátiles, los cuales dan un aroma especial, siendo mucho de ellos, beneficiosos para el sistema respiratorio; carbohidratos, con gran poder energético ya que liberan glucosa; musílagos, buenos tanto a nivel intestinal como respiratorio; saponina de acción expectorante y hormonal.

Según para qué, necesitaremos una u otra planta, así por ejemplo:

  • Para aliviar o calmar dolores, el harpagofito, la ulmaria.
  • Para ayudar al organismos a reducir inflamaciones, el harpagofito, la caléndula.
  • Para modular los procesos febriles, la tila, la salvia.
  • Para calmar la tos, el tusílago, la drosera.
  • Para regular la diarrea, la gayuba, la algarroba.
  • Para ayudar a regular y detener hemorragias, cola de caballo, ruda.
  • Para calmar la sensación de nauseas, jengibre, melisa.
  • Para regular la eliminación de gases intestinales, relajando el sistema digestivo, anís, hinojo.
  • Para estimular la expulsión de bilis, alcachofera, berenjena.
  • Para aumentar la producción de bilis, olivo, genciana.
  • Para modular el ciclo menstrual, caléndula, sauztgatillo.
  • Para favorecer la expulsión de mucosidad y liberar los bronquios, eucalipto, llantén.
  • Para favorecer la eliminación de líquidos, cola de caballo, ortiga.
  • Que estimulan la secreción de leche materna, anís, hinojo.
  • Que favorecen y provocan el sueño, amapola, lúpulo.
  • Que regulan el sistema nervioso, tila, valeriana.

Con lo que la reflexión que tenemos que hacernos es que, si las plantas tienen un objetivo, cual es, ayudarnos en la consecución de un estado óptimo de salud, a un caso concreto, según que planta. ¿ Deberíamos tomarlas todos los días, aún no teniendo el problema concreto para lo que están destinadas?.


Con respecto a si es importante o no el momento de la toma, decir que, en un biodrenaje es bastante importante tomarlas tiempo antes de la comida, pues la mezcla de plantas que se utilizan para este fin responden a una función depurativa y su acción es mucho más efectiva sin nada en el estómago.

información y consultas : whassapp ( 646 91 47 40) / correo electrónico: ( mnoemigonzruiz@gmail.com )


martes, 7 de abril de 2015

Desintoxicación

En esta entrada, vamos a intentar explicar e indentificar la variedad de toxinas que existen en nuestro cuerpo y las formas naturales de desintoxicación y eliminación de éstas.

Aunque hoy me toca decirlo a mí, no creo que para vosotros sea algo sorprendente y revelador, que las sustancias tóxicas están por todas partes: en el aire que respiramos, en los alimentos que comemos, en el agua que bebemos, e incluso los generados por nuestro propio cuerpo.

Uno de los grupos tóxicos que hay, son los metales pesados, como el plomo, el mercurio, el cadmio, el arsénico, el níquel y el aluminio, que tienden a acumularse en el cerebro, los riñones, siendo el sistema inmune el que más lo sufre y por el que observamos el flaco favor que nos hace tal excedente por envenenamiento continuo ( alergias, dermatitis, insuficiencia respiratoria, intolerancias, depresión, hiperactividad en niños, infertilidad, cáncer … .), a través de los carburantes que respiramos, contaminación ambiental producida por la industria, pinturas, barnices, tintes textiles, cosméticos, empastes, y un largo etcétera.

La fuentes más comunes de los minerales pesado, el de más peso, el plomo de la industria, de la gasolina, los pulverizadores de pesticidas y los utensilios de cocina; el cadmio y el plomo del humo de los cigarrillos; el mercurio de los empastes dentales, pescado contaminado y los productos cosméticos; y el aluminio de los antiácidos y los utensilios de cocina.

Los factores nutricionales que combaten el envenenamiento por metales pesados incluyen un suplemento vitamínico y mineral de gran potencia; minerales, como calcio, magnesio, zinc, hierro, cobre y cromo; vitamina C y vitaminas del complejo B; aminoácidos con contenido de azufre ( metionina, cisteína y taurina) y alimentos con alto contenido de azufre como ajos, judías, cebollas y huevos; y fibras hidrosolubles tales como guar, pectina y semillas de psilio.

Otro de los grupos tóxicos serían, los productos químicos tóxicos, fármacos, alcohol, disolventes, pesticidas, herbicidas, formaldehído y aditivos alimenticios, que afectan básicamente al hígado. Es sorprendente contemplar la tremenda carga que tiene que soportar el hígado para desintoxicar la increíble cantidad de tóxicos químicos a los que de forma continúa está expuesto. Los componentes que ayudan a desintoxicarlo pueden ser, entre otros, las hierbas medicinales como, el diente de león, la alcachofera, el cardo mariano, la raíz de cúrcuma, … .
La toxicidad de aditivos alimenticios, disolventes ( materiales de limpieza, formaldehído, tolueno, benceno, etc.), pesticidas, herbicidas y otros tóxicos químicos, o la simple exposición a los mismos, pueden dar lugar a numerosos síntomas. Los más comunes son de tipo psicológico o neurológico, como depresiones, dolores de cabeza, confusión mental, enfermedad mental, hormigueo en las extremidades, reflejos nerviosos anormales y otros signos del funcionamiento irregular del sistema nervioso, que es sumamente sensible a estos productos químicos. También se observa alergias del tracto respiratorio e incremento de los porcentajes de muchos cánceres en personas expuestas crónicamente a toxinas químicas.



El último grupo tóxico, lo componen los compuestos microbianos, toxinas producidas por bacterias y hongos en el intestino, como las endotoxinas, exotoxinas, aminas tóxicas, derivados tóxicos de la bilis, … . Las toxinas microbianas derivadas del intestino han sido relacionadas con una amplia variedad de enfermedades, tales como la enfermedades del hígado, enfermedad de Crohn y colitis ulcerativa, enfermedad de la tiroides, psoriasis, lupus eritematoso,pancreatitis, alergias, asma y problemas inmunológicos.
Para reducir la absorción de sustancias tóxicas se recomienda una dieta rica en fibra hidrosoluble. La fibra tiene la capacidad de envolver las toxinas dentro del intestino y facilitar su expulsión.
Los productos de desecho del metabolismo de las proteínas, también son sustancias tóxicas que el cuerpo tiene que eliminar, por lo que intentaremos mantener los riñones ( responsables de la eliminación de las toxinas de la descomposición de las proteínas, amoniaco, urea, etc.) en buen estado, bebiendo adecuadamente cantidades suficientes de agua buena y evitando un excesivo consumo de proteínas.

La eliminación y desintoxicación de estas sustancias venenosas que desequilibran el estado físico y emocional de nuestro cuerpo, sólo se puede realizar de manera activa y consciente por parte de la persona, a través de un profesional en la materia que le irá acompañando e indicando como proceder en cada momento.

Los métodos de desintoxicación son, entre otros, el biodrenaje del organismos y el ayuno. 

información y consultas : whassapp ( 646 91 47 40) / correo electrónico: ( mnoemigonzruiz@gmail.com )